Política Antifraude

Muchos individuos son susceptibles de cometer fraude en contra de cualquier organización por medio de una comprensión inteligente de su estructura de control interno. Normalmente, este hecho se representa en tres categorías: malversación de activos, reporte financiero fraudulento y corrupción.

El fraude es un tema serio y de especial importancia, especialmente en la economía de hoy en día. Bajo determinadas circunstancias algunos individuos pueden mirar hacia las oportunidades que existen dentro de la estructura de control interno de la compañía para cometer fraude con la intención de no ser detectado o dificultar esta acción

Cuando estas se dan unas condiciones propicias el riesgo de que se cometa un fraude puede aumentar significativamente. Un método de prevención es la detección de la oportunidad, es decir, detectar posibles riesgos de fraude. En LABE contamos con un equipo especializado que gracias al diseño y la implementación de un ambiente de control previene, detiene y desincentiva los comportamientos fraudulentos, bien sean perpetrados por empleados, vendedores, consultores o gerentes.

Acabamos con el fraude con claves como:

• Un comité de auditoría empoderado
• Una evaluación del riesgo rigurosa
• Una línea de denuncia efectiva
• Políticas antifraude bien establecidas
• Respuesta eficaz a las denuncias